Cuanto mayor sea la consecuencia derivada de no tener un empleo y/o un ingreso económico, mayor será el nerviosismo y la energía que se dedicará para evitarlo. Las personas que no tienen a nadie a su cargo afrontan mejor la situación al no verse tan responsables del bienestar de otros. Cuando tras hacer todo lo que se puede para evitar algo, se sigue sin saber cuál será el desenlace final, habrá que generar estrategias para no derrumbarse y poder afrontar sin bloqueos lo que esté por venir. Los pensamientos circulares e inacabables sobre como evitar quedarte sin dinero, son muy bloqueantes. Para romper la inercia que producen, tienes que valorar si permitirte el pensamiento de quedarte sin dinero es como darte por vencido, o por el contrario puede llegar a calmarte y ayudarte a asumir que no tienes todo el control sobre la situación que querrías. Ten en cuenta los siguientes conceptos para que después te proponga una tarea que te ayude:
- Razonamiento emocional.
- Síntomas depresivos y hacer renuncias.
- Necesidad de control.
- Expectativas no realistas
- Exigencia
Tarea
Retomando la idea de que una vez hecho lo que está en tus manos, hay que intentar conseguir un estado de ánimo óptimo para afrontar la búsqueda de empleo, te voy a proponer una tarea muy eficaz para este fin. Quiero que una vez al día, durante una semana, me escribas una carta “desde el futuro”. Pongamos desde dentro de 2 años en el que me vas a contar que al final se hizo realidad tu temor: sigues en paro y sin dinero. Es posible que te parezca algo absurdo pensar en ello voluntariamente, pero date cuenta de que hasta el momento no has podido quitarte de la cabeza tu temor debido a que tu única opción es que no pase lo que temes. Empleas mucho tiempo buscando certezas que no dependen tanto de ti como te gustaría. Esta carta te va a ayudar a convivir con tu temor de una forma menos obsesiva y te ayudará a necesitar menos seguridad hacia el futuro, y de esta forma no te bloquearás. Quizás no te parezca una tarea muy apetecible e incluso pesimista, pero recuerda que el objetivo es enfrentarte a tu temor y a esa posibilidad para disminuir el bloqueo.
Conclusión
El temor a quedarme sin dinero es lógico y razonable, lo que no lo es tanto es querer tener la certeza de que lo que temo nunca ocurrirá. Temerlo más no lo hace más probable (tampoco menos, la verdad).
Cuidado, a veces cuando nos sentimos vulnerables es fácil sentir que no seremos capaces de afrontar o resolver los retos que tenemos pendientes. Si además se nos juntan dificultades extra inesperadas, podemos sentirnos más impotentes e incapaces de resolverlas.
Los síntomas depresivos no tienen porque configurar una depresión, son a menudo necesarios como paso previo a aceptar cambios bruscos en la vida. Cada persona necesita su tiempo para afrontar y asumir las acontecimientos que se producen en su vida. Fijar objetivos realistas adaptados a los que podemos conseguir o no, nos ayudará a que los síntomas de tristeza o apatía se mantengan dentro de unos niveles adecuados.
Afrontar lo que temes (recuerda la carta) puede ser una manera muy eficaz de hacer frente a tus temores.
Cuanta más distancia haya entre lo que queremos conseguir y lo que realmente tengamos o seamos capaces de alcanzar, más inquietud e incluso tristeza se puede producir. Es por esto que debemos ajustar nuestras expectativas a las situaciones reales que estamos viviendo.