Vamos a comenzar a afrontar y a aprender a interpretar correctamente las sensaciones relacionadas con el calor y su miedo asociado a alguna enfermedad o al inicio de una crisis de ansiedad. Como hemos visto la ansiedad aumenta la sensación de calor debido a que hay una mayor afluencia de sangre a los músculos. Además se tiende a sudar más para favorecer que no nos sobrecalentemos y que los músculos no rindan adecuadamente. Por tanto es frecuente y normal la sensación de calor, sudor y sofoco cuando estamos ansiosos. Vas a afrontar unas sensaciones leves de calor. Para el primer ejercicio necesito que te enfrentes a sensaciones de calor, no es necesario llegar a sudar. Vas a afrontar está sensación sin que se añadan otras sensaciones propias de las crisis de ansiedad. Tienes que buscar un espacio caliente en el que puedas permanecer unos minutos sin interrupciones externas. Puede valer un baño, un coche, una habitación… Tenemos que conseguir que tengas calor. Puedes conseguirlo por medio de ropa de abrigo o una calefacción. Cuando ya estés en esas condiciones y empieces a tener calor inicia el primer experimento.
Ejercicio 1: De acuerdo. Ya tienes calor. Es posiblemente la primera vez que has decidido voluntariamente tener calor y no huir de él. Es importante que dejes la sensación de calor. No negocies contigo mismo salir o quedarte. Quizás no es muy agradable pero es necesario convivir unos minutos con esta sensación. Es importante que no te alejes. Es solo una sensación incómoda. Solo deja pasar unos minutos. Si quieres puedes interrumpir el ejercicio pero merece la pena aguantar un poco más (…) eso es. ¿Cómo te sientes? Valora tu nivel de malestar (…) Vamos a continuar. Vamos a continuar hasta llegar a cero. No negocies contigo mismo salir o quedarte. Quizás no es muy agradable pero es necesario convivir unos minutos con esta sensación. Es importante que no te alejes. Es solo una sensación incómoda. Vamos a aprender a separar lo que temes de lo que en realidad está ocurriendo. Solo deja pasar unos minutos. Si quieres puedes interrumpir el ejercicio pero merece la pena aguantar un poco más (…) eso es. ¿Cómo te sientes? Valora tu nivel de malestar (…) (Bis)
Ejercicio 2. Vas a repetir el ejercicio anterior para consolidar tus avances. Es importante fortalecerte ante la posibilidad de sentir calor, especialmente cuando estés en entornos en los que temas que la ansiedad suba y se descontrole. Es importante dejar en esta ejercicio que el calor produzca sudoración. Forma parte de tus sensaciones temidas y es importante que las sientas con menor nivel de amenaza posible. Cuando vuelvas a estar con calor inicia el ejercicio (…)
De acuerdo. Ya tienes calor. Es posiblemente la primera vez que has decidido voluntariamente tener calor y no huir de él. Es importante que dejes la sensación de calor. No negocies contigo mismo salir o quedarte. Quizás no es muy agradable pero es necesario convivir unos minutos con esta sensación. Es importante que no te alejes. Vamos a aprender a separar lo que temes de lo que en realidad está ocurriendo. Es solo una sensación incómoda. Solo deja pasar unos minutos. Si quieres puedes interrumpir el ejercicio pero merece la pena aguantar un poco más (…) eso es. ¿Cómo te sientes? Valora tu nivel de malestar (…) Vamos a continuar. Vamos a continuar hasta llegar a cero. No negocies contigo mismo salir o quedarte. Quizás no es muy agradable pero es necesario convivir unos minutos con esta sensación. Es importante que no te alejes. Es solo una sensación incómoda. Solo deja pasar unos minutos. Si quieres puedes interrumpir el ejercicio pero merece la pena aguantar un poco más (…) eso es. ¿Cómo te sientes? Valora tu nivel de malestar (…)(Bis)
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