El TDAH en adultos es menos evidente que en niños o adolescentes. Tiene algunas características diferentes, pero suele ser muy útil conocerlas para gestionarlas. Este trastorno es por sí mismo un diagnóstico controvertido. Tanto por su diagnóstico como por el tratamiento, es objeto muchas veces de crítica. Hay personas que consideran que es una manera de ser y no un problema. El TDAH no tiene un correlato específico con una estructura del cerebro. Es decir no es una cuestión de aspecto del cerebro, sino del funcionamiento de genes y neurottrasmisores.
A nivel clínico, sí existen evidencias de que algunas personas tienen patrones de reacción ante los estímulos internos y externos diferentes a la media de las personas. Podemos definir el déficit de atención como un trastorno de conducta caracterizado por un deterioro persistente de la capacidad para mantener la atención y/o concentración, y / o síntomas de hiperactividad e impulsividad.
Criterios para el diagnóstico del TDAH
Para hacer el diagnóstico de TDA, se suele tener en cuenta si seis o más de los siguientes síntomas están presentes en la persona. Han de estar presentes durante al menos seis meses hasta un punto que implica inadaptación y que no se corresponde con el nivel de desarrollo. A menudo:
- No presta atención suficiente a los detalles y comete errores por descuido.
- Tiene dificultades para mantener la atención.
- Parece que no escucha.
- Parece que no es capaz de terminar lo que empieza.
- Tiene dificultades para organizar tareas.
- Evita las tareas en las que es necesario mantener la atención.
- Pierde cosas necesarias para sus actividades.
- Se distrae con facilidad.
- Es olvidadizo.
Para hablar de hiperactividad e impulsividad han de darse los siguientes síntomas:
- Está inquieto.
- Se levanta de su asiento.
- Corretea o trepa en exceso.
- Tiene dificultades con las actividades recreativas tranquilas.
- “ No para quieto” o “está como una moto”.
- Habla demasiado.
- Responde antes de que se le termine de preguntar.
- Tiene dificultades para esperar su turno.
- Interrumpe o se entromete..
Unos pocos datos neurológicos
Los estudios de genética clásica que indagan sobre la presencia de factores genéticos en el TDAH indiscutiblemente ilustran que este trastorno presenta factores genéticos en su desarrollo.
Aunque su descubrimiento se realizara de forma casual, la asociación de mutaciones en las proteínas principales encargadas de la neurotransmisión de la dopamina también es indiscutible.
La hipótesis hipodopaminérgica del TDAH es simplificadora. Hay más estructuras neuronales relacionadas, pero es adecuada para ofrecer un titular sobre las causas principales
Características particulares del TDAH en adultos
Digamos que existen muchas manifestaciones del TDAH, en función de la persona. Los condimentos suelen ser tres: actividad, atención y tenencia a la impulsividad. El modo en el que se combinen darán el resultado final. En los adultos es menos frecuente la impulsividad, pero también puede estar presente a pesar de los años.
Los TDA y los TDAH, con los años tienden a perder la «T», es decir deja de ser un trastorno para convertirse en una característica de personalidad y de funcionamiento en la vida. Los adultos suelen ser activos y energéticos, si fueron hiperactivos; y despistados a la par que multifuncionales en el caso de los que tuvieron déficit de atención. En lo referente a la impulsividad, solemos observar que se transforma en impaciencia.
En los casos en los que se mantiene el grado de trastorno, suele tener menor intensidad que en los niños. Aun así a veces es fundamental para entender ciertas tendencias a la adicción, para entender el gravedad de un trastorno obsesivo comnpulsivo, a la hora de entender miedos sociales…
¿Siempre es un problema el TDAH en adultos?
Para mí el deficit de atención y la hiperactividad puede ser una cualidad extraordinaria si se sabe gestionar adecuadamente. Dependiendo del grado de afectación podríamos hablar de que el déficit de atención y la hiperactividad pueden ser casi un superpoder. Permite trabajar en paralelo y/o con niveles de energía superiores a la media. El problema es cómo se utiliza esta capacidad. No siempre quien tiene estas características enfoca correctamente su capacidad en objetivos que sean útiles para obtener metas o recibir reconocimiento.
Si la persona con TDAH se enfoca en resolver miedos, o en satisfacer metas obsesivamente, con cierta probabilidad se pasará de vueltas… Se puede quemar por la cantidad de energía puesta en buscar soluciones o eliminar peligros. Muchas veces obteniendo pocos resultados prácticos a pesar del esfuerzo. A veces podría incluso agravar cuadros de ansiedad severos como son los ataques de pánico, la ansiedad generalizada, ansiedad social o el trastorno obsesivo-compulsivo.
Es frecuente que los TDAH tiendan a tener sentimientos de culpa y una autoestima disminuida al compararse con otros adultos que son más capaces de estar atentos, de ser más ordenados y estructurados. Esto suele cambiar mucho cuando descubren que no tienen que hacer las cosas como lo hacen otras personas. Basta con encontrar una manera propia de hacerlas. A menudo igualmente eficaces y exitosas. Es frecuente también, que en su historia personal haya recibido críticas, y enfados por parte de educadores y amigos por hacer las cosas de otro modo. Con lo años suele ser a la inversa. Reciben reconocimiento por lo que hacen aunque no siempre les calma y lo disfrutan.
Maneras de gestionar el TDAH – DAH
La clave para gestionar las características del déficit de atención y la hiperactividad está 3 aspectos principales:
- El deporte.
- La exigencia y las normas.
- Medicación.
Parece que los TDAH tienen más necesidad que otras personas de estar estimulados. Necesitan y desean tener retos: buscan noticias, visualizan vídeos en redes sociales, les gusta medir su habilidad por medio de un deporte, por un videojuego, tocando un instrumento musical; es frecuente que tengan música, radio, o podcast conectados para que les hablen… Cuantos más estímulos más apetecible es la actividad que realizan.
El deseo de recibir estímulos es más propio de una necesidad que de una apetencia sin más. El hecho es que en la medida en la que reciben muchos estímulos, llega un punto en el que se calman y son más capaces de atender. En cualquier caso la línea que separa el exceso de estímulo y la calma es muy fina. Es fácil, que el TDAH se exceda y tienda a hacer de más.
@azorfernando Los estudios de genética clásica que indagan sobre la presencia de factores genéticos en el TDAH indiscutiblemente ilustran que este trastorno presenta factores genéticos en su desarrollo. Aunque su descubrimiento se realizara de forma casual, la asociación de mutaciones en las proteínas principales encargadas de la neurotransmisión de la dopamina también es indiscutible. La hipótesis hipodopaminérgica del TDAH es simplificadora. Hay más estructuras neuronales relacionadas, pero es adecuada para ofrecer un titular sobre las causas principales Características particulares del TDAH en adultos Digamos que existen muchas manifestaciones del TDAH, en función de la persona. Los condimentos suelen ser tres: actividad, atención y tenencia a la impulsividad. El modo en el que se combinen darán el resultado final. En los adultos es menos frecuente la impulsividad, pero también puede estar presente a pesar de los años. Los TDA y los TDAH, con los años tienden a perder la «T», es decir deja de ser un trastorno para convertirse en una característica de personalidad y de funcionamiento en la vida. Los adultos suelen ser activos y energéticos, si fueron hiperactivos; y despistados a la par que multifuncionales en el caso de los que tuvieron déficit de atención. En lo referente a la impulsividad, solemos observar que se transforma en impaciencia. En los casos en los que se mantiene el grado de trastorno, suele tener menor intensidad que en los niños. Aun así a veces es fundamental para entender ciertas tendencias a la adicción, para entender el gravedad de un trastorno obsesivo comnpulsivo, a la hora de entender miedos sociales….. #tdah #tdahadulto #Psicoterapia
Una persona con DAH reacciona como lo hace un termostato de una calefacción de casa. Normalmente necesita que la temperatura suba (más que la media), para que a partir de ese momento pueda apagarse la caldera. Digamos que ese es el momento en el que se calmaría y no tendría que estar activa buscando estímulos.
Podemos decir que hacer un deporte regularmente, tener claras ciertas normas sociales o compromisos con las tareas que se compromete, junto con tomar medicación (normalmente estimulante como es el caso de las anfetaminas, o el café), ayuda a controlar las características que vengo describiendo del DAH. Cuando a los adultos, desde pequeños se les explica cómo son y qué modos hay de gestionarlo, mejor se llevan con su características. A veces es algo intuitivo, y por ensayo error son capaces de gestionarlo con éxito. Así pues saber estimularse adecuadamente puede ser una excelente forma de disfrutar y aprovechar estas características.
Fernando Azor es director de azor & asociados.
Fernando lleva años explicando sin tecnicismos las ideas y conceptos que fundamentan la psicología actual. Hace que que la psicología sea fácil y accesible. Ofrece tareas, consejos y conocimientos de psicología que puede usarse para resolver problemas de la vida diaria. El propio Colegio oficial de psicólogos de Madrid, le otorgó un reconocimiento por su labor divulgativa de la psicología clínica en diferentes medios de comunicación. Puedes ver muchos videos divulgativos en el perfil de TikTok
Gracias Fernando por tus aportaciones al mundo de la psicología. Siempre tan útiles y efectivas tanto para los clientes,como para muchos de los profesionales sanitarios que te seguimos. Gracias por tu trabajo.
Gracias Beatriz! besos
Hola, Fernando
Qué pruebas estandarizadas se utilizarían para evaluar el tdah en adultos? Gracias.
Un cordial saludo
Buenos días las pruebas más adecuadas la suelen aplicar los neuropsicólogos para medir tiempos de reacción efectos de los distractores en las tareas que piden a sus evaluados… Utilizando algunas escalas del WAIS, se puede hacer un buen diagnóstico de TDA-H