Las pérdidas en general implican un cambio muchas veces brusco. En función de la capacidad de cada persona para afrontar pérdidas y cambios, podrá surgir mayor o menor malestar cuando se producen, llegando a configurar un trastorno adaptativo. Algunas situaciones que pueden ser potencialmente generadoras de malestar son:
- La Jubilación.
- La muerte de un ser querido.
- La marcha de los hijos de casa: “el nido vacío”.
- La muerte de una mascota.
- Pérdida de trabajo.
- El final de una relación.
- Los problemas de salud.
Los síntomas que pueden alertarnos de un trastorno por adaptación son:
- Dificultad para estar concentrado, por ejemplo con lectura, viendo una película…
- Sensación de cansancio y molestias musculares.
- Cambios anímicos bruscos que se secuencian incluso a lo largo de un mismo día.
- Sentimiento de desesperación.
- desajuste de los patrones de sueño: insomnio e hipersomnia.
- Aumento o disminución del apetito.
Las pérdidas pueden afectar profundamente en la manera en la que nos relacionamos, sobre nuestras emociones, y por supuesto sobre nuestras respuestas fisiológicas (taquicardia, ritmo intestinal…). Desde la psicoterapia, el psicólogo es consciente de que no siempre se puede llenar el hueco dejado por una pérdida, pero se pueden buscar mecanismo eficaces de alivio y estrategias de apoyo para abreviar los procesos adaptativos derivados de grandes cambios.
Tipos de trastorno de adaptación
Según el manual de diagnóstico, DSM-5, se enumeran 6 tipos diferentes de trastornos de adaptación. Aunque todos están relacionados, cada tipo tiene signos y síntomas específicos. Los trastornos de adaptación pueden ser los siguientes:
- Con estado de ánimo depresivo. Los síntomas comprenden, principalmente, llanto y sensaciones de tristeza y desesperanza, así como falta de placer en las cosas que solías disfrutar.
- Con ansiedad. Los síntomas comprenden, principalmente, nerviosismo, preocupación, sensación de agobio y dificultad para concentrarte o recordar cosas. Los niños que tienen un trastorno de adaptación con ansiedad pueden tener mucho miedo de que los separen de sus padres y seres queridos.
- Con una mezcla de ansiedad y estado de ánimo depresivo. Los síntomas comprenden una mezcla de depresión y ansiedad.
- Con alteración de la conducta. Los síntomas comprenden, principalmente, problemas conductuales, tales como peleas o conducción imprudente de vehículos. Los jóvenes pueden faltar a la escuela o vandalizar propiedades.
- Con una mezcla de alteración de las emociones y de la conducta. Los síntomas comprenden una mezcla de depresión y ansiedad, así como problemas conductuales.
- Sin especificar. Los síntomas no corresponden a los demás tipos de trastornos de adaptación, pero a menudo comprenden problemas físicos, problemas con la familia o amigos, o problemas en el trabajo o la escuela.
Duración de los síntomas
La duración de los signos y síntomas del trastorno de adaptación también puede variar. Los trastornos de adaptación pueden ser los siguientes:
- Agudo. Los signos y síntomas duran seis meses o menos. Deberían aliviarse una vez que el factor que causa el estrés se elimine.
- Persistentes (crónicos). Los signos y síntomas duran más de seis meses. Continúan molestándote y perturban tu vida.
Tratamiento del trastorno de adaptación
La psicoterapia para el trastorno adaptativo está enfocada a
D. Fernando Azor Lafarga, director de Azor & Asociados, PsicologodeCabecera.com y PsicologoAeronautico.com, cuenta con más de 20 años de experiencia. Licenciado en Psicología Clínica, con múltiples especializaciones y participación en medios, ofrece psicoterapia y asesoría pericial. ¡Descubre más sobre su trayectoria y expertise!»